Desde que comencé a adentrarme en el mundo de la cultura, hace más de diez años, no son pocas las veces que me he preguntado cuál es mi compromiso con la sociedad que vivo. Creo, es más, espero que esta no sea la última vez que me inquiete este entresijo.
Desde el momento mismo que surge el arte y los artistas el resto de la sociedad los han puesto en el punto de mira, ya que para muchos escribir, pintar, actuar, en fin crear, es una tarea inferior e improductiva. A nosotros, los que de una forma u otra estamos vinculados al arte, seguimos siendo objeto de análisis. Entérense de una vez, el arte es más productivo y necesario que sembrar papas. Llenar el cuerpo es tarea fácil, lo verdaderamente difícil es llenar es alma.
Crear es tan complejo como sembrar, hacer nacer y crecer una planta para saciar el hambre del cuerpo de los hombres, pero existe una “pequeña” diferencia, son más los que pueden dar de comer al cuerpo que los que logran regocijar el alma.
En momentos de crisis como los que está viviendo el mundo actualmente la sociedad toda debe ponerse en función de solucionar, hasta donde cada uno pueda, los problemas económicos de un país y hasta del mundo. En casos como este vuelven los artistas a estar la diana y vuelve a ser cuestionada su obra.
Los hombres y mujeres que trabajan en el transporte deben ser más eficientes y puntuales, los gastronómicos deben aprovechar los recursos al máximo… y así cada uno de los sectores se pone en función de la crisis y de cómo solucionarla, entonces ¿Cuál sería el sacrificio que debe hacer un artista ante una problemática como esta? Muchos son los que creen que estos seres, dotados de una sensibilidad escasa en los humanos, deberían vincularse a otros sectores más productivos que dedicarse a la creación ¿no es así?
Si a nadie se le ocurre decir que para mejorara la economía de un país los médicos deben convertirse en agricultores y los campesinos ir al quirófano por qué entonces los artistas deben dejar de hacer arte para hacer otra cosa más provechosa ¿es que acaso al arte es algo improductivo?
En ves de preocuparse para buscarle un espacio en otro sitio al artista no sería mejor incentivarlo para que se vincule en la lucha social desde su lugar ¿Por qué no se planifican conciertos, lecturas de poesías, presentaciones de obras teatrales con fines de recaudar dinero o con el objetivo de que los hombre, que tanto hacen por sacar adelante la economía de un país, den alimento a su alma? No es secreto para nadie que después de una velada cultural el hombre se enfrenta con nuevos bríos al surco, al timón, al pueblo. Con el alma llena se necesita menos comida para alimentar el cuerpo.
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